Reportaje en profundidad. Actualizado a 20/06/25
Prostitución en la Antigüedad clásica
La filóloga clásica y profesora de Griego y Cultura Clásica Juana Martínez Otón (Cartagena, 1963) es autora del libro Prostitutas de la Antigua Grecia. La verdad de las fuentes textuales (2021), un ensayo del que la propia especialista dice: "He escrito el libro que a mí me hubiese gustado leer hace mucho tiempo". En la conferencia que se puede visualizar más abajo, además de dar pinceladas sobre su obra, ejemplifica en base a textos (algunos de los cuales mitos) y otras fuentes documentales (tablillas, esculturas y cerámicas...) características de la prostitución en la Antigua Grecia. Todo ello teniendo en cuenta que pretende acercar un poco la verdad, una verdad relativa apunta, ya que pueden aparecer nuevos descubrimientos que pongan en entredicho lo que hasta ahora se sabe. No obstante, hace un llamamiento a la necesidad de recuperar el conocimiento del mundo antiguo del que procedemos, siendo importante "recuperar la memoria histórica con datos" para poder hacernos una idea de cómo era.
"El mundo antiguo está pereciendo y está en un gran pozo y lo estamos dejando morir. Está sacando una mano para que le pongamos en el lugar que le toca" (Juana Martínez, filóloga clásica)
A lo largo de la ponencia, explica que a veces se puede tener una visión utópica de una Grecia clásica "cándida y pura", cuando esta está muy lejos de acomodarse a dicha visión. Basándose en una foto de una película en la que se refleja una imagen de la acrópolis, cuenta que "la urbanización nos la trajo Roma" y Atenas no estaba urbanizada, salvo la presencia de algunos templos. En algunos de estos templos aparecerían columnas con esculturas de las cariátides, mujeres persas provenientes de Caria, una antigua región de Asia Menor. Eran, dice, esclavas persas que fueron raptadas como botín de guerra en el s.V a.C. No es el único ejemplo que se da donde se fundamenta que la prostitución estaba habitualmente ligada a la esclavitud y a la trata, así como al rapto y a la guerra, siendo las prostitutas en su mayoría mujeres forzadas. Otro de los ejemplos que señala tiene que ver con una inscripción del s. IV a.C. en la que se advierte a los habitantes de que hay que defenderse de la ciudad en caso de ataque: "Si no defendéis nuestra ciudad, vosotros seréis sometidos y vuestras mujeres e hijas prostituidas". También menciona el ejemplo más actual que se dio en el s.XX cuando los soldados japoneses raptaban a las niñas coreanas y las forzaban a prostituirse (es muy interesante lo que cuenta de las esculturas que pueden verse hoy en Corea y su reflexión sobre si el tema de la mujer se usa como arma política...).
Volviendo a las ciudades griegas, la ponente apunta que era una "ciudad de hombres, un club de hombres", donde pocas mujeres se veían por las calles. Del mismo modo, en Roma también la prostitución estaba ligada a una sociedad masculinizada y dominada por el sexo masculino. Así lo recoge el investigador de la Universidad de Jaén, Rubén Montalbán, en el artículo "El oficio más antiguo del mundo. Prostitución y explotación sexual en la Antigua Roma" (2016). En una Roma donde el paterfamilias ("jefe o cabeza de familia") era siempre un hombre con autoridad sobre las personas que formaban parte de su familia (incluidos también los esclavos), así como sobre las propiedades/bienes. El autor recoge que "si un paterfamilia de una familia humilde moría o enfermaba, en muchas ocasiones la prostitución se convertía en la única vía de supervivencia". También se menciona en base a otros autores, que la mujer podía ser prostituida en su condición de sierva y esclava o porque sus padres la vendieran o forzaran a alquilar su cuerpo con fines sexuales. En este contexto ya existía el "chulo o proxeneta" que se denominaba en latín leno: "El leno conseguía prostitutas mediante la compra de esclavas en los mercados, extranjeras raptadas por los piratas o la recogida de niños y niñas abandonados al nacer (mayoritariamente de procedencia humilde o de jóvenes violadas)" (Montalbán, p. 158). Esto último, abandonar a los niños/as o exponerlos era un derecho romano conocido como ius exponendi.
Este comercio del sexo que ya existía en la Antigüedad clásica, no solo suponía la venta del sexo femenino al sexo masculino a veces a través de terceros, sino que también era una manera de recaudar dinero para las arcas públicas. La profesora Juana Martínez muestra en la conferencia una inscripción en piedra de la isla griega de Cos ubicada actualmente en el Museo Arqueológico de Estambul: "Serán grabados con un impuesto especial la cera, el cereal, la madera el vino y las heteras". Las heteras explica que eran prostitutas diferentes a las porne, asociadas las primeras a mujeres más cultas y a las que se contrataba para las fiestas en las que se bebía y se hacían orgías, mientras las porne eran "las vendidas" y "usadas" para ocasiones espontáneas, tenían un significado aún más despectivo. En total, el hombre griego "tenía cuatro tipos de mujeres" prosigue: la porne, la hetera, la esposa legal con la que tenía hijos/as y también la concubina, mujeres estas últimas vendidas para ser mantenidas y con las que podían tener hijos. Además, explica que la ley griega prescribía lo siguiente: "Si un hombre encontraba a su esposa legal o concubina con otro hombre tenía derecho a matarlas".
Porque si algo deja claro la ponente es que los griegos "no mostraron piedad ni tristeza hacia estas mujeres". Mujeres que fueron en su mayoría denostadas, a las cuales conocemos a través de las voces de varones "que osaron hablar con total libertad y sin piedad sobre ellas y sus antepasadas", sentencia. Se puede trazar un paralelismo con el artículo que habla de Roma en el que diferencia a las prostitutas en función "del grado de autonomía y de explotación sufrida": cortesanas o prostitutas de lujo (por su parte Juana Martínez opina que el término cortesana es anacrónico y se emplearía en la Edad Media), concubinas, prostitutas esclavas... El autor también habla de "la doble moral" donde por una parte, se veía necesaria y se exaltaba la prostitución "para preservar la pureza de las matronas que eran sometidas a tabúes que impedían el desarrollo de su deseo sexual aplicándose técnicas como la de negación de conciencia" (Montalbán, p.174) y por otro, la marginación y desprotección legal a la que estaban sometidas y donde el varón "gozaba de un óptimo desarrollo sexual mediante la práctica de relaciones extramatrimoniales donde podría realizar todo lo prohibido en el matrimonio". Además de esta "doble moral romana", en Grecia, la filóloga en la conferencia expone que se tiene constancia de unas tablillas del año 1300 a.C. en las que se hacía alusión a una supuesta prostitución sagrada que se llevaba a cabo en los templos ligadas a las deidades, la fertilidad y la madre tierra.
Datos sobre la compra de sexo
En cuanto al consumo actual de prostitución, las autoras Berta Aznar y Judith Lorente revisan en su artículo "El consumo de prostitución en España: ¿Qué sabemos sobre los compradores de sexo?" (en Revista Internacional de Estudios Feministas, 2025) otros artículos científicos y encuestas poblacionales publicadas entre 2003-2023. En la tabla se recogen algunos datos, si bien para tener una visión más completa se recomienda la consulta directa del artículo citado.
Algunos datos de la muestra |
% de hombres que ha pagado alguna vez
en su vida por sexo |
Encuesta a 8.201 hombres en EE.
UU. (datos Demand Abolition, 2018)
|
20´6% |
Encuesta a 2.336 hombres de entre 18
y 75 años en Alemania (datos Döring et al., 2022) |
26’9% |
Contexto español |
|
Encuesta a 10.980 participantes
con el objetivo de explorar la salud y hábitos sexuales (datos INE, 2003)
|
25’4% de hombres entre 18 y 49 años |
Encuesta a 9.850 personas a partir
de 16 años para estudiar la salud sexual nacional (datos Centro de
Investigaciones Sociológicas: CIS, 2009)
|
32’9% |
Encuesta en Barcelona a 369 hombres
(Ayuntamiento de Barcelona, 2014)
|
20’87% |
Tabla
de elaboración propia a partir de datos de la siguiente fuente:
Aznar-Martínez,
B., & Lorente-De-Sanz, J. (2025). El consumo de prostitución en España: ¿Qué
sabemos sobre los compradores de sexo?. Atlánticas. Revista
Internacional de Estudios Feministas, 10(1), 02–22.
https://doi.org/10.17979/arief.2025.10.1.10999 |
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Las señoritas de Avignon, Pablo Picasso (Málaga, 1881-Francia, 1973) Imagen con licencia CCO-BY-SA-NC Por Candy Mar (30 septiembre 2015) en Flickr. https://www.flickr.com/photos/candymartv/21655102458 Esta obra fue pintada por Picasso en París entre 1906 y 1907 Se cree que representa a chicas en un burdel de la calle Avinyó de Barcelona. Se puede escuchar más sobre esta y otras obras del pintor en el pódcast de RTVE "Los cuadros de Picasso" |
Volviendo a la Resolución de la UE, se hace hincapié también en la educación sexual para promover una sociedad libre de violencia y donde las personas puedan desarrollar su integridad física y mental. Según la OMS la salud sexual es un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Además, ya en 1975 en un informe de esta misma entidad se definía la salud sexual como la integración de elementos somáticos, emocionales, intelectuales y sociales que además potencien la personalidad, la comunicación y el amor. Diversos médicos y especialistas en Sexología, Medicina Familiar y Comunitaria, Urología, Ginecología y Obstetricia, etc en el libro Sexología Médica (2019) hablan también de los derechos sexuales como derechos universales y ponen el ejemplo de la Declaración de Derechos Sexuales de Valencia en 1997: libertad sexual, autonomía, integridad y seguridad sexual, privacidad, equidad, placer, expresión emocional, salud sexual y educación sexual... También recogen la importancia de la sexualidad en personas con discapacidad y otras patologías, desmontando al mismo tiempo mitos y tabúes y recogiendo las creencias asociadas (y muchas veces distorsionadas y que han perpetuado la discriminación) de diferentes religiones y posturas.
Concluyendo, hablar de prostitución es por tanto, hablar de esclavitud y trata, de conflictos armados, de explotación y violencia, de consumo de sustancias psicoactivas y adicciones, de pornografía, de una industria que se lucra de toda esta lacra, de diferentes tipos de discriminación, de situaciones dolorosas y traumáticas, de vidas precarias y deshumanizadas, de sexismo y racismo, de pobreza y vulnerabilidad, de maltrato y abuso infantil y de un sinfín de cuestiones que en última instancian violan los derechos humanos. Cuestiones todas ellas que atentan también contra la salud (derecho constitucional art.43) y el derecho a la educación sexual de las personas (derecho a la educación, art.27 Constitución española), algo que ha de garantizarse en un Estado Social y Democrático de Derecho.